Dirección:
C/ Emilio Castelar, 26
El palacio fue construido entre los años 1700 y 1775. Está declarado como “Monumento Histórico-Artístico” desde 1962 y protegido como Bien de Interés Cultural. El palacio fue residencia de la familia de Peñaflor hasta 1958, cuando falleció la marquesa viuda sin descendencia. Desde entonces los bienes fueron administrados por la Fundación de los Excelentísimos Señores Marqueses de Peñaflor y de Cortes de Graena.
El edificio está situado en la antigua calle de los Caballeros y destaca por sus formas curvas y por la profundidad que crea la fachada. Su tendencia horizontal se rompe con la verticalidad de la portada, que es de gran monumentalidad: adintelada con columnas sobre basamento que sostienen un frontón mixtilíneo que alberga en su interior el escudo de sus fundadores. En el segundo cuerpo se abre un balcón que servía para que los Marqueses hicieran sus apariciones públicas. El balcón, flanqueado por columnas salomónicas sobre cabezas de leones, acentúa el carácter barroco. La torre-mirador, cuadrada, también contribuye a romper la horizontalidad del edificio.
El edificio está situado en la antigua calle de los Caballeros y destaca por sus formas curvas y por la profundidad que crea la fachada. Su tendencia horizontal se rompe con la verticalidad de la portada, que es de gran monumentalidad: adintelada con columnas sobre basamento que sostienen un frontón mixtilíneo que alberga en su interior el escudo de sus fundadores. En el segundo cuerpo se abre un balcón que servía para que los Marqueses hicieran sus apariciones públicas. El balcón, flanqueado por columnas salomónicas sobre cabezas de leones, acentúa el carácter barroco. La torre-mirador, cuadrada, también contribuye a romper la horizontalidad del edificio.
El palacio se organiza en torno a un patio central rodeado por todas las habitaciones de vivienda distribuidas en una planta baja y otra superior. Un zaguán precede al patio y a las caballerizas. El patio, de mediados del s. XVIII, se estructura a base de dos cuerpos de columnas.
De gran interés artístico es la decoración de la escalera de acceso a la planta alta: tres arcos de medio punto apoyando en dobles columnas sobre pedestales preceden la cúpula de media naranja que cierra la caja de la escalera. La cúpula, dividida por ocho costillas que se unen en el centro por un florón, se decora toda con yeserías. Los elementos que aparecen son querubines, conchas, hojas de acanto e incluso dos estípites a ambos lados del retablo de Ntra. Sª. del Rosario. Es un programa decorativo realizado por Cristóbal Portillo a finales del s. XVIII.
En cuanto al programa pictórico de la fachada, fue realizado por el madrileño Antonio Fernández, y se data a mediados del XVIII. Aparecen elementos decorativos arquitectónicos, florales y figuras alegóricas.
Palacio de Benamejí
Dirección: Plaza de la Constitución.
El edificio comenzó a construirse a principios del siglo XVIII. Se trata, al igual que el Palacio de Peñaflor, de un modelo de arquitectura civil en el barroco español y una de las joyas del gran siglo ecijano.
El edificio fue originalmente propiedad de los marqueses de Benamejí y posteriormente de los condes de Valverde. Más tarde albergó la Remonta Militar y desde 1997 es sede del Museo Histórico Municipal.
La enorme fachada es de ladrillo con zócalo de piedra y una hilera de balcones en la primera planta. Dos grandes torres en los extremos determinan la nota de verticalidad en el aplomado conjunto, cuya sobriedad y monotonía rompe la gran portada.
Al traspasar la puerta, un inmenso arco da paso al apeadero, donde se encuentra al fondo la escalera principal, formada por tres arcos sobre columnas dóricas y cubierta por cúpula de media naranja, y a la derecha las caballerizas, que alberga una exposición con los restos arqueológicos hallados en la Plaza de España, “El Salón”.
Por debajo de la escalera se accede al patio principal que consta de dos plantas con arcos de medio punto apoyados sobre columnas y fuente de piedra en el centro. Alrededor del patio se sitúan las salas del Museo Histórico Municipal, construido esencialmente a partir de explicaciones sobre el significado social de los objetos arqueológicos.
Las piezas del museo son materiales recuperados en excavaciones urbanas, piezas existentes en la colección arqueológica municipal, y de la donación o depósito temporal de piezas por ciudadanos y ciudadanas de Écija o instituciones. Entre ellas destacan mosaicos de grandes dimensiones y de gran calidad y la escultura romana de la Amazona Herida, es la única del mundo conservada prácticamente completa que presenta restos de policromía.
Como dato anecdótico, citar que en este palacio se rodaron algunas escenas de la película “Carmen” de Vicente Aranda en el año 2002.
Según relata la leyenda, en el siglo XVIII los reyes absolutistas de nuestra monarquía tenían el derecho de conceder o no la construcción de torres o torreones en sus castillos o casas-palacio. Éstas torres eran símbolos de poder y dominio.
Carlos III pasó por Écija y se alojó en el Palacio del noble Conde de Valverde. El monarca, agradecido, le concedió levantar una torre en el Palacio. Tras un tiempo el monarca volvió a alojarse en el mismo Palacio y halló dos torres, sorprendido le preguntó al noble, el cual respondió “una de las torres es la que su majestad me ha concedido y la otra es la que me corresponde por mi rango”.
Palacio de Valhermoso
Dirección: C/ Emilio Castelar 37. Horarios: no visitable. Propiedad privada
Tiene una importante portada plateresca, relacionada con el Renacimiento cordobés del siglo XVI, colocada en el ángulo de la espaciosa barrera, cuyo puntos iniciales lo forman robustos miradores que contienen en sus bases fustes romanos de granito.
Nos encontramos en el "punto urbanístico" más privilegiado del casco histórico, se divisan los palacios de Valdehermoso y de Peñaflor y en los extremos de la encrucijada las torres más bellas del barroco ecijano, la de San Gil y la de San Juan, modelos insuperables a tener en cuenta entre las torres españolas del siglo XVIII.

Palacio de Palma
Dirección: C/ Espíritu Santo, 10
Este palacio se asienta sobre un antiguo convento de la Orden Dominica.
La entrada del palacio da paso al apeadero, donde se divide a la izquierda las caballerizas y a la derecha el patio central de dos plantas y con arcos de medio punto y columnas de mármol. Desde este patio se accede al patio de los naranjos, con una fuente de piedra y el antiguo pozo de conventual, que según una antigua leyenda conecta con un pasadizo que llega hasta el río Genil.
En la planta alta se pueden visitar las habitaciones con su mobiliario antiguo. La sala del escritorio, la sala de la música, varias galerías con antigüedades, salón comedor con pavimento del siglo XVI, y otro salón decorado con artesonado con lacería de estrellas.
Palacio de Santaella
Dirección: C/ Ignacio de Soto.
La portada está labrada en piedra, con pilastras - cariátides que le dan gran personalidad. La escalera se cubre con una monumental cúpula sobre tambor cuyas yeserías están policromadas, se complementa con ornamentación floral y paisajes, obra muy relacionada con la fachada del Palacio de Peñaflor, probablemente realizada por el mismo taller. Es muy interesante la carpintería de este palacio, con magníficas puertas talladas.
Palacio de Almenara Alta
Dirección: C/ Mármoles Horario: no visitable. Propiedad privada
Situado en la típica calle mármoles. La fachada en ladrillo visto tiene una original portada en la parte central tallada en piedra, con labores barrocas muy simples, se remata con una hornacina que contiene un lienzo de la Virgen de la Soledad. Destaca en la parte superior de la fachada una galería abierta con arcos de medio punto.
Palacio de Justicia
Dirección: C/La Marquesa, 15
Este edificio es conocido popularmente como Palacio de las Tomasas, ya que perteneció a dos hermanas ecijanas apodadas así. Presenta una exuberante decoración "historicista”, basada en la ornamentación de la Alhambra, lugar que impresionó vivamente a sus propietarias, y es uno de los más admirados por los visitantes y forasteros.
En el zaguán encontramos un zócalo de azulejería de Triana. Destacan también los artesonados, el patio principal y la escalera.
Casa-Palacio de Los Parejas
Dirección: Plaza de Santa María s/n
La blanca fachada tiene en la esquina un esbelto mirador, formado por arcos de medio punto con cubierta a cuatro aguas y la portada labrada en piedra es de estilo barroco de finales del siglo XVIII. La dinámica cornisa se eleva en ángulo para sostener el escudo de la familia Pareja. Partes destacadas del edificio son la bóveda que cubre la escalera y el patio cuadrangular, formado por doble arquería de arcos de medio punto.
El edificio es la sede de la Biblioteca Pública Municipal "Tomás Beviá ", comunicándose a través de un patio con el Archivo Histórico Municipal situado en la calle Cintería.

Casa-Palacio de Villaverde de San Isidro
Dirección: C/Cintería, 14
La original fachada barroca datada en 1767 se configura por tres frentes, originando una escueta barrera en la estrechez de la antigua calle gremial de la Cintería. El balcón de hierro forjado se adapta a los tres planos y en el centro la sobria portada de piedra, con pilastras dóricas y el escudo del marquesado.
Casa-Palacio de Los Castrillos
Dirección: C/Emilio Castelar, 43
Formando esquina con Calle Juan de Angulo, la fachada enfoscada en amarillo se configura con vanos de iluminación guarnecidos de ladrillo moldurado, alternando frontones triangulares y curvos encima de los balcones. La portada de estilo neoclásico, combina la piedra y el ladrillo visto. En la parte superior se observa el escudo de la familia Fernández Golfín.
Palacio de Alcántara

Fachada edificada en ladrillo y tapial, con bellas rejas de forja en sus balcones y ventanas, mostrando un ancho mirador de doble arco y una suntuosa portada labrada en piedra, correspondiendo al segundo tercio del siglo XVIII. La cornisa sustenta un balcón de forja, flanqueado por un frontón partido entre pilastras jónicas y en el centro, el escudo del marquesado de Alcántara.
El Marqués de Alcántara, dueño de un extenso y rico patrimonio costeó las obras de la cercana torre de San Juan.
El Palacio fue reconvertido en Centro de Enseñanza en el siglo XX, actualmente es la sede de la U. N. E. D., la Escuela de Idiomas, la Asociación de Amigos de Écija, y de la Real Academia de Ciencias, Bellas Artes y Buenas Letras “Luis Vélez de Guevara”.

Casa señorial de Fernández de Córdoba
Dirección: C/Emilio Castelar, 38
Ejecutada en ladrillo visto, la armónica fachada con sencilla portada neoclásica, se levanta con tres plantas, la última formada por una galería de arcos de medio punto sobre columnas dóricas de ladrillo moldurado. El edificio es la sede de Hacienda, en horario laborable es posible visitar el interior.
Mirador de Peñaflor
Dirección: Plaza de España
En la plaza denominada del Salón, antigua Plaza Mayor, han pervivido algunos edificios singulares denominados “miradores” que poseían los nobles locales para contemplar los festejos que en dicho espacio se celebraban. Uno de los más destacados es el que poseía el Marqués de Peñaflor, que se conserva en muy buen estado. Dicho edificio, de poco fondo pero de gran desarrollo en la fachada como correspondía a su finalidad, es del siglo XVIII y posee una planta baja con soportales y galerías abiertas en las plantas superiores guarnecidas de guardapolvos en los que se conservan restos de pinturas murales, como era habitual en el gran siglo ecijano.
Mirador de Benamejí
Dirección: Plaza de España
Otro de los miradores en buen estado de conservación es el conocido por el nombre de Benamejí, por haber sido mandado construir por el Marqués de este título, también en el siglo XVIII.
Como el de Peñaflor, su objeto era contemplar los festejos que tenían lugar en la Plaza Mayor. Con fachada de menor anchura que el anteriormente citado, su desarrollo en altura es similar; una planta baja de soportales y tres plantas sobre ella de galerías abiertas con arcos sobre columnas. Remata el edificio una amplia cornisa en cuyo centro se halla el emblema heráldico de la Casa propietaria, apellido Bernuy, rematado por corona calada.
Como es típico en Écija, este inmueble tuvo decorada su fachada con pinturas murales, de las que se conservan restos muy significativos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario